Último viaje

Acaba de ser lanzado por última vez el Endeavour, el más joven de los transbordadores espaciales de la NASA. Este será su último viaje tras 19 años en servicio. En esta misión final transporta seis astronautas a la estación espacial internacional donde permanecerán 16 días llevando a cabo varios experimentos astrofísicos.

El Endeavour, junto con sus naves gemelas Atlantis y Discovery constituyen la flota actual de transbordadores de la NASA. Tras este viaje tan solo queda una ultima misión que será realizada por el Atlantis allá hacia el mes de julio próximo. Es tiempo ahora de recordar la larga lista de logros alcanzados gracias a estas naves. Y también los trágicos momentos vividos. Como la explosión que supuso la destrucción del Challenger durante su lanzamiento el 28 de 1986 provocando la muerte de los siete astronautas que lo tripulaban.  O la desintegración del Columbia durante la re-entrada a la atmósfera el 1 de febrero de 2003 que también supuso la muerte de sus siete tripulantes.

El lanzamiento de esta última misión del Endeavour ha estado rodeado de todos los ritos de estas grandes ceremonias reuniendo a unas 500.000 personas que han contemplado en directo el formidable espectáculo. Recuerdo cuando cada lanzamiento desde Cabo Cañaveral constituían un autentico acontecimiento mundial que congregaba a millones de personas alrededor de los televisores. Ahora son casi rutina. Pero esta ocasión, la número 25 para el Endeavour, ha incluido el sabor especial de ser la ultima y definitiva.

Una vez que se complete la última misión de los transbordadores que, como ya hemos mencionado, corresponde al Atlantis las tres naves serán exhibidas en varios museos. El Endeavour irá al Centro Científico de California situado en Los Angeles. El Discovery podrá ser contemplado en Museo Nacional  Smithsonian  del aire y el espacio a las afueras de Washington y el Atlantis se quedará en el Centro de Visitantes del Centro espacial Kennedy.

Las necesidades de enviar equipos y astronautas a la estación espacial ya no podrá ser cubierta por la NASA que deberá utilizar naves rusas para este propósito. Se espera que en un futuro no muy lejano una nueva generación de transbordadores tome el relevo para la continuación de la exploración espacial.