viernes, 14 de diciembre de 2012

Encuentro con los años 30


Desde el pasado 1 de octubre el Museo Reina Sofría presenta una de las exposiciones más importantes de la temporada. Bajo el título "Encuentros con los años 30" la muestra tiene como finalidad la conmemoración del 75º aniversario de la realización de la emblemática obra Guernica (1937), por parte de Pablo Picasso, que constituye una de las mas importantes joyas de la Colección permanente del Museo.

La década de los 30 tuvo el negativo antecedente inmediato del crack de Wall Street en 1929. Y continuó con males mayores como la Guerra Civil en España, el ascenso del nazismo, la pujanza de la Unión Soviética y el principio de la Segunda Guerra Mundial. En unos casos los artistas colaboraron con los Estados desde la propaganda o la nueva "pedagogía" dirigida a las masas, o bien tomaron caminos hacia la crítica del poder y los acontecimientos que se iban sucediendo. En este entorno, los artistas también lucharon contra sus propios fantasmas utilizando un nuevo concepto de la abstracción, el surrealismo o el realismo y nuevos medios de expresión como la fotografía, el cine, los carteles o las revistas. En la la exposición se pone de manifiesto que los años 30 no fueron una etapa menor en la historia del arte, sino una década de intensidad artística extraordinaria especialmente en España. Al mismo tiempo se sucedieron numerosas exposiciones internacionales en las que los Estados intentaban mostrar su desarrollo, sus logros o la construcción de nuevos conceptos de sociedad en proyectos en los que colaboraron muchos artistas.



La exposición plantea que la producción artística de esta época -marcada tanto por un creciente clima de violencia política como por la aparición de importantes innovaciones tecnológicas, especialmente en el ámbito de la comunicación y de los transportes- no sólo debe concebirse como una extensión inercial de las vanguardias de las dos décadas anteriores y/o en su relación, especialmente conflictiva, con las narrativas propagandísticas, sino también como un momento en el que se cuestiona y reformula la modernidad en el que comenzaron a generarse ideas y objetos que desafiaban los límites entre disciplinas, medios y naciones.

Pablo Picasso. El Rescate (1932)
La década de los 30 del siglo XX se presenta en la muestra como un periodo turbulento en el que el arte y el poder se aliaron y confrontaron y que, a muchos niveles, resulta clave para entender nuestro propio presente. La exposición se compone de más de cuatrocientas obras, que ocupan una superficie de 2.000 m2  en dos plantas del Museo, y proceden de prestigiosas instituciones de todo el mundo, tanto españolas (IVAM, Museo Nacional de Arte de Cataluña, Filmoteca Nacional y de Cataluña, Fundació Gala Salvador Dalí, Residencia de Estudiantes, fondos del Museo Reina Sofía…); como extranjeras (Centro Georges Pompidou, Museo Pushkin de Moscú, MoMA, Salomon R. Guggenheim de Nueva York, National Gallery de Washington, Museo de Filadelfia, Metropolitan Museum de Nueva York, The Wolfsonian-IFA, International Center of Photography de Nueva York, Nationalgalerie de Berlín…). 

Max Beckmann. Sociedad parisina. (1931)
Abordando la noción de encuentro desde una óptica temática, la exposición analiza el papel que en la creación artística de los años treinta desempeñaron los desplazamientos simbólicos y geográficos que, de forma voluntaria o forzada, realizaron los artistas de la época. Tratando de mostrar cómo a partir de dichos desplazamientos se empezaron a repensar los postulados estéticos heredados de las vanguardias y a desarrollar estrategias discursivas y narrativas que han perdurado hasta la actualidad. A su vez, la muestra propone una reflexión crítica en torno al uso que estos artistas hicieron de los medios de comunicación de masas y explora las tensiones y relaciones que mantuvieron con los contextos -políticos, culturales, institucionales- en los que trabajaron.

Paul Delvaux. Mujer ante el espejo. (1936)
Encuentros con los años 30  se ha estructurado en seis secciones: realismos; abstracción; exposiciones internacionales; surrealismo; fotografía, cine y carteles; España: Segunda República, Guerra Civil y exilio. En cada una de ellas se plasman las principales preocupaciones y problemáticas que marcaron la década desde el punto de vista político, estético y cultural. Se pretende presentar este convulso y apasionante período, no sólo desde las narrativas propagandísticas, sino también desde la manera en la que los artistas tuvieron que trazar su propio camino en un ambiente de creciente violencia. Y sin dejar de abordar la influencia de la coyuntura política ni eludir las rivalidades que se plantearon entre (y dentro de) los principales "ismos" artísticos de la época, se da prioridad a las conexiones entre artistas y a los momentos de fractura y eclecticismo estilístico, poniendo de relieve la diversidad, audacia y complejidad del arte que se hizo en aquella década.

En la muestra se encuentran obras de algunos de los artistas más importantes del siglo XX: Pablo Picasso, Joan Miró, Yves Tanguy, Moholy-Nagy, Man Ray, Max Beckmann, Robert Delaunay, André Masson, Piet Mondrian, Wassily Kandinsky, Luis Buñuel, Joaquín Torres-García o Mario Sironi, entre otros muchos. Por otra parte, es una ocasión única para ver varias piezas que por primera vez visitan España. 


Joan Miró. La estrella fugaz (1938)


viernes, 9 de noviembre de 2012

La isla del Tesoro



Todos estamos familiarizados con este título. Al menos en mi época de juventud se encontraba entre los “clásicos” que leíamos durante la adolescencia. Por otra parte, la obra de Robert Louis Stevenson ha sido llevada repetidamente al cine y la televisión aunque, al menos en mi opinión, la mejor de todas las adaptaciones sigue siendo la dirigida por Victor Fleming en 1934. Por ello me ha resultado sorprendente conocer que en la Fundación March hay una exposición bajo este título que no tiene nada que ver con aventuras de piratas.

En realidad se trata de una ambiciosa muestra sobre arte británico que pretende llenar las lagunas que sobre el mismo tenemos en nuestro entorno. En esta situación, fácilmente reconocemos las influencias y logros  artísticos italianos o franceses que, como mínimo, consideramos más relevantes que los procedentes de la Gran Bretaña. Con el fin de corregir esta realidad, la aspiración de los promotores de esta exposición es aumentar el conocimiento del público español sobre la historia de las artes plásticas en el Reino Unido durante los últimos cinco siglos.

Para ello se han reunido obras provenientes de unos 80 prestadores, fundamentalmente británicos, pero que incluyen también museos y coleccionistas privados de Portugal, Suiza, Estados Unidos, Alemania y España. Gracias a este esfuerzo es posible hacerse una idea de la extraordinaria dimensión y la vitalidad que conocieron las diversas manifestaciones artísticas en Gran Bretaña a partir de la iconoclastía introducida por la Reforma protestante del siglo XVI y hasta el siglo XX. Descubrimos así una vigorosa tradición visual que hasta ahora no había sido fácil para nosotros conocer en toda su variedad y amplitud.

Y ya resulta comprensible la razón del titulo de la exposición. La isla (Gran Bretaña) no está explorada del todo por nuestra parte. Y tiene un tesoro -el de su arte- que, como casi todos los tesoros, está aún medio oculto, por descubrir. Para ello se ofrece una panorámica de esa tradición, frecuentemente desconocida, de más de cinco siglos. La exposición presenta artistas británicos famosos y otros menos conocidos, nativos e importados, organizándolos en siete secciones que dibujan una serie de aspectos del arte británico durante cada época.


1  Destrucción y Reforma 1520-1620

Hans Holbein. Sir Thomas Wyatt
Enrique VIII es un importante benefactor de las artes y la enseñanza, así como compositor y poeta por mérito propio. El ilustrado mecenazgo que dispensa al pintor alemán Hans Holbein coincide con su ruptura con Roma, que le permitirá divorciarse de su esposa  española, Catalina de Aragón, y casarse con Ana Bolena. Para trabajar junto a Holbein llegan a Inglaterra otros destacados artistas europeos, entre ellos el florentino Pietro Torrigiano, contemporáneo de Miguel Ángel en la Academia Lorenzo de Medici. Hasta principios del siglo XVIII en el ámbito de las artes plásticas británicas predominarán los artistas extranjeros.

En deuda directa con las miniaturas de Holbein y con su sutil estilo pictórico están los grandes miniaturistas isabelinos y jacobinos Nicholas Hilliard e Isaac Oliver. Las diminutas imágenes, pintadas sobre vitela pegada en fragmentos de barajas de cartas, se montaban normalmente dentro de preciosos relicarios y servían para el lucimiento de unos pocos elegidos que los llevaban a modo de joya.

La figura principal de la pintura isabelina tardía es Marcus Gheeraerts II, miembro de una dinastía de artistas de Brujas llegados a Inglaterra en la década de 1560 como refugiados religiosos. Gheeraerts fue probablemente el primer pintor que trabajó sobre lienzo en Inglaterra; hasta ese momento los artistas pintaban sobre tablas de madera.

William Larkin. Lady Thorhagh
Las pinturas al óleo y las miniaturas se creaban para una élite. En Inglaterra, tras la Reforma, la mayoría de la gente tenía acceso a la imaginería iconográfica a través de toscas pinturas murales en casas y hosterías o de obras impresas, que representaban temas religiosos, morales o tradicionales. Prácticamente todas las imágenes estaban vinculadas a un texto, sobre todo a las palabras de la Biblia. Las que disfrutaban de mayor difusión eran los grabados en madera de Actas y monumentos (1563) de John Foxe, también conocido como El libro de los mártires. Estas imágenes, a menudo truculentas, pretendían reafirmar la solidez protestante en una época de gran tensión religiosa, y se guardaron en la mayoría de las iglesias hasta el siglo XIX.

2        La Revolución y el Barroco 1620 – 1720

Bajo el reinado de Carlos I se produce un resurgimiento del mecenazgo regio.
La figura clave es Anthony van Dyck, pintor nacido en Amberes que se afinca en Londres en 1632. Van Dyck lleva a Inglaterra un sofisticado estilo pictórico que muestra el impacto de la pintura de Tiziano. Los retratos de tonos plateados que realiza Van Dick del rey y la reina y de otras figuras destacas de la sociedad inglesa traen a la memoria un mundo brillante pero cerrado,que se aísla peligrosamente de amplios sectores de la sociedad,.

Cuando estalla la guerra civil en 1642, Carlos traslada su corte a Oxford. La otra ciudad universitaria importante, Cambridge, se convierte en un baluarte para los poderes parlamentarios. Durante este periodo de exilio surge un gran artista londinense, el pintor William Dobson. Sus retratos muestran la influencia de Van Dyck en la pincelada segura y resuelta, pero además poseen una calidad propia mas rotunda. Mientras Dobson pinta a los partidarios de Carlos, en 1643 el iconoclasta William Dowsing recibe el encargo del Parlamento de retirar las imágenes prohibidas de las iglesias de los condados del este del país.

James Thorhill.
St. Paul preaching at Athens
En el caos de la década de 1640 surge el retratista Peter Lely. Durante el gobierno republicano pinta al lord protector Oliver Cromwell y, tras la restauración de la monarquía en 1660, domina el mundo del retrato hasta su muerte en 1680. Sus imágenes de las exquisitas bellezas femeninas de la corte de Carlos II evocan un mundo de placer -para muchos un mundo de libertinaje y corrupción-. Su sucesor como retratista principal, el alemán Godfrey Kneller, introduce un estilo mas sobrio y sencillo con el que no sólo deja constancia de aristócratas, sino también de prominentes escritores, artistas, científicos y otras figuras públicas.

Hacia finales del siglo XVII se aprecian los primeros signos de un mundo artístico comercial, y con él la diversificación de estilos artísticos. Los paisajes de Jan Siberechts ofrecen una imagen detallada de una nación con una economía floreciente y una creciente confianza política y militar. Esta confianza también queda plasmada en los grandes proyectos decorativos que se encargan para dos de los edificios barrocos de Christopher Wren: la catedral de San Pablo y el Royal Naval Hospital, ambos llevados a cabo por un inglés, James Thornhill.

3.       Sociedad y Sátira 1720 - 1800

William Hogart.  La carrera de la prostituta
Las famosas series de William Hogarth de la década de 1730 y 1740 lo han convertido en uno de los artistas británicos más importantes. Su serie La carrera de la prostituta de 1732-33 estableció un modelo de arte narrativo que despertaba el entusiasmo del público por toda Europa.  La obra de Hogarth, marcadamente revolucionaría, era a la vez plenamente consciente de la moda, y estaba muy influida por el gusto por los conversation pieces (retratos de grupo) franceses e italianos, así como por la vida que le rodeaba en Londres. Su obra se exponía junto a la de amigos como Francis Hayman en lugares como los Vauxhall Gardens, y el Foundling Hospital para huérfanos. Estos enclaves fueron las primeras galerías de arte públicas en Gran Bretaña. El legado de Hogarth se puede apreciar, más avanzado del siglo, en la sátira social del caricaturista Thomas Rowlandson o en la sátira política del dibujante James Gillray

Arthur Devis. Mr. and Mrs. Hill
A mediados del siglo XVIII, en Gran Bretaña se origina una creciente demanda de reconocimiento profesional pleno por parte de los artistas. La ley de Hogarth de 1734 hace posible un control mayor sobre la reproducción de las obras. En 1768 se produce  la fundación de la Royal Academy of Arts que, dirigida por Joshua Reynolds, proporcionaba a los artistas un estatus, un espacio expositivo de prestigio e instalaciones dedicadas a la formación. Reynolds, muy influido por las ideas estéticas y morales de la obra “Características de los hombres, maneras, opiniones” del tercer conde de Shaftebury, aportó al arte británico una nueva base filosófica.

La demanda de retratos empieza a ser mucho mayor y a finales de siglo el paisaje se configura también como un género más importante que los temas históricos. Algunos artistas como Thomas Gainsborough y Thomas Lawrence exigían precios muy altos por sus obras. El epicentro de este comercio es Londres, de modo que artistas de otros lugares de Gran Bretaña -es el caso del pintor escocés AllanRamsay- se ven obligados a trabajar allí para ejercer su profesión.

4  Paisajes de la Mente  1760 - 1850

En sus inicios el desarrollo del arte paisajístico británico estaba muy influido por el gusto aristocrático por la obra clásica del pintor francés del siglo XVII Claude Lorrain. En la década de 1750 el artista galés Richard Wilson viaja a Italia para estudiar la región de la Campagna, cerca de Roma; a su regreso a Gran Bretaña, comienza a pintar lienzos al estilo de Lorrain.

John Martin. Joshua commanding the Sun
A finales del siglo XVIII, adquieren popularidad nuevos estilos de paisaje. En 1757  Edmund Burke publica su ensayo “Indagación filosófica”, donde esboza una distinción entre "lo bello" y "lo sublime", atribuyendo a lo último una experiencia del poder de la naturaleza que sobrecoge al espectador. Estas ideas influyen en artistas como Turner y John Martin, mientras que otros se inclinan hacia el paisaje popular "pintoresco", que trae a Gran Bretaña a un número creciente de turistas. Las últimas pinturas de paisajes de Thomas Gainsborough pueden calificarse de "pintorescas", así como las del artista romántico Samuel Palmer, que otorga a sus escenas pastoriles una profunda espiritualidad.

El arte de finales del siglo XVIII manifiesta una fuerte inclinación científica. Los famosos cuadros de caballos de George Stubbs están basados en las disecciones equinas para su estudio La anatomía del caballo. Muy interesante, por anticipador, es el caso de Joseph Wright of Derby, uno de los pocos pintores que crean imágenes de la Revolución Industrial y de los avances científicos de la época.

Quienes se oponen a la Royal Academy y al gusto establecido, a menudo están comprometidos con la idea de la pintura de historia y pretenden que las exposiciones se lleven a cabo en edificios públicos. El radical más locuaz es el artista escocés y republicano James Barry, expulsado de la Academia durante las guerras napoleónicas.

WilliamBlake, defensor de Barry, apoya opiniones similares, aunque, como evidencian sus abundantes imágenes bíblicas, parecía más interesado en asuntos espirituales. En el caso de Henry Fuseli encontramos a un erudito artista extranjero que se autoproclama republicano en política pero conservador en el arte. Al igual que Barry y muchos otros artistas, Fuseli realiza una serie de cuadros de gran tamaño para la Shakespeare Gallery de John Boydell en Pall Mall, que se hicieron muy populares a través de estampas.

5  Realismo y Reacción 1850 - 1900

La era victoriana presencia un enorme crecimiento de las instituciones artísticas. Se inauguran la National Gallery, el Victoria and Albert Museum y la Tate Gallery, Junto con las escuelas de arte y diseño que también se abren por todo el país, los nuevos museos y galerías asumen la misión de mejorar el gusto de la nación, y con ello, eso se esperaba, su moralidad y su productividad económica. Gran parte del arte del siglo XX concuerda con la seriedad de estas ambiciones, desde la preocupación prerrafaelita por la "fidelidad a la naturaleza", pasando por las cruzadas de John Ruskin y William Morris para cambiar el arte y la sociedad, hasta el esteticismo extremo de Dante Gabriel Rossetti, James Abbott McNeill Whistler y otros más avanzado el siglo. Los efectos de la industrialización que empiezan a manifestarse de modo patente complican esta tarea y generan un debate abierto, a menudo de gran virulencia, sobre el papel del arte.

Dante Gabriel Rossetti. Proserpine
Los prerrafaelitas, liderados por Rossetti, John Everett Millais y William Holman Hunt, pretenden devolver al arte británico lo que ellos consideran el estilo más puro de arte medieval y dar a sus contenidos una nueva seriedad, de la que carecía, a su juicio, la obra de muchos contemporáneos. Muchos artistas secundaron sus inquietudes naturalistas, como John Brett en sus paisajes realizados con precisión fotográfica, o Atkinson Grimshaw en sus escenas urbanas e industriales. Las pinturas de Frederic Leighton y George Frederic Watts representan un importante estilo victoriano cuyas raíces se hallan en la pintura de historia del siglo XVIII, y alcanzan gran difusión gracias a las estampas y a las distintas revistas de arte que por entonces comienzan a publicarse.

El alejamiento de la ideología religiosa en favor de la científica y utilitaria a lo largo de la era victoriana anima mucho a artistas a adoptar una "religión del arte" evidente en la transición hacia el esteticismo, el simbolismo y, en el caso del efímero Aubrey Beardsley, hacia una exquisita y oscura decadencia. El americano Whistler fue el más brillante exponente de estas ideas, que plasma en diferentes escritos sobre arte, en los que desafía a quienes le criticaban por encontrar la belleza en la forma y el color, sin recurrir a constricciones narrativas y morales. Otro artista americano, John Singer Sargent es uno de los artistas que lleva las técnicas impresionistas a Gran Bretaña. A finales de siglo, el arte británico se halla, de un modo fascinante, en la cúspide de una nueva era.

6  Modernidad y Tradición 1900 - 1940

Uno de los seguidores de Whistler es el pintor anglo-danés Walter Richard Sickert. A finales del siglo XIX pasaba largas temporadas en París; más tarde se  instala en Londres, donde se convierte en la figura principal de un grupo de artistas llamado Camden Town Group. Pintan escenas cotidianas que reflejan la miseria que los rodea. Por su parte, los artistas del Grupo de Bloomsbury, como Duncan Grant, pintan su propio entorno de clase media y tratan de salvar las distancias que hay entre las bellas artes y el diseño de alfombras, mobiliario y otros objetos. Asimismo encontramos artistas fascinados por los aspectos industriales de la vida del siglo XX, que buscan el estilo adecuado para abordar estos temas. Spencer Gore, del Camden Town Goup, plasma en un estilo postimpresionista el ferrocarril de su lugar de residencia, la recién creada localidad de Letchworth. Los artistas vorticistas, encabezados por Lewis, elaboran la revista Blast, que despliega un agresivo ataque a la cultura británica muy en consonancia con su radical tipografía.

Ben Nicholson. Painting 1937
Durante la década posterior a la Primera Guerra Mundial el arte británico experimenta una lenta evolución hacia el modernismo internacional, sobre todo gracias a algunos artistas más jóvenes, como Ben Nicholson y Henry Moore. Al igual que artistas mayores, como Paul Nash, reaccionaban ante el arte europeo abstracto y surrealista, y se identifican con un movimiento cosmopolita que abarca la arquitectura de Walter Gropius y Le Corbusier asi como varias formas de ideología utópica. Sin embargo, muchos artistas mantienen su estilo figurativo: William Roberts y Edward Burra, de distinta manera, buscan una forma de arte vernáculo moderno relacionado con la vida social contemporáneo, al tiempo que Stanley Spencer, desde su Cookham natal, practica un descarnado estilo realista y crea su propio mundo imaginativo, en el que los humanos interactúan con seres espirituales.

En 1939, una vez más, la guerra irrumpe en la escena artística británica; de nuevo los artistas se alistan y a menudo se convierten en artistas de guerra. Las escenas de dirigentes militares y científicos que retrata Meredith Frampton poseen una intensidad surrealista que refleja las extraordinarias presiones que Gran Bretaña padeció durante la contienda.

7  Un Mundo Feliz 1945 - 1980

David Hockney. Portarit of Nick Wilder
Tras la Segunda Guerra Mundial, el arte británico evoluciona en múltiples direcciones. El sentimiento de ansiedad y fragmentación se refleja en las obras de Francis Bacon y Graham Sutherland. A comienzos de la década de 1950 el mundo se ilumina gracias al arte pop de Richard Hamilton y Eduardo Paolozzi, que utilizan   la publicidad, el cine y  otras manifestaciones de la cultura popular para crear estimulantes obras siempre inquisitivas y a menudo cínicas. Les siguen Peter Blake, David Hockney y Patrick Caulfield, que alcanzan gran popularidad en los años 60.

La pintura abstracta florece en St. Ives, población pesquera de Cornualles donde Peter Lanyon y otros artistas se inspiran en el mar y en el paisaje local. El arte más urbano y sofisticado del movimiento Op Art de Bridget Riley, y la escultura de acero pintada de Anthony Caro colocada en el suelo, proporcionan un aire democrático y novedoso en la sintonía del “Swinging London”.

El auge del arte conceptual a finales de la década de los 60 coincide con la aparición de brotes de política radical. Aunque los artistas, como Gilbert&George, Keith Arnatt, Ian Hamilton-Finlay y Richard Long,  no puedan ser adscritos a una tendencia política común, si comparten una nueva actitud hacia los materiales y las formas de usarlos ya que emplean fotografías, videos, palos, piedras y otros objetos que previamente se consideraban impropios del arte.

La llegada al poder de Margaret Thatcher en 1979 impacta no solo en los ámbitos políticos y económicos del Reino Unido sino también en lo cultural. La inmensa pieza de Tony Cragg llamada Gran Bretaña vista desde el norte, de 1981, elaborada con desechos plásticos, constituye una obra emblemática y en cierta forma profética de la transformación radical que se avecina.

Tony Cragg. Gran Bretaña vista desde el Norte

sábado, 20 de octubre de 2012

Retratos

Desde que la Fundación Mapfre inauguró sus salas de exposiciones en el Paseo de Recoletos nos ha acostumbrado a disfrutar de muestras de muy alta calidad. En esta ocasión tampoco defrauda sino todo lo contrario.  La exposición "Retratos. Obras maestras del CentrePompidou" propone un recorrido por género del retrato en los distintos movimientos artísticos del siglo XX, a través de una cuidada selección de 80 obras maestras  que forman parte de las colecciones del Centro Pompidou de París. La muestra abarca un periodo cronológico que se inicia con el retrato de Erik Satie, realizado por Suzanne Valadon en 1892-1893, y finaliza con The Moroccan, de John Currin, de 2001. Entre los artistas representados destacan Pablo Picasso, Francis Bacon, Henri Matisse, Robert Delaunay, Antonio Saura, Jean Dubuffet, Joan Miró y Amedeo Modigliani, cuyas obras completan un notable conjunto de óleos y esculturas de gran calidad, reunidas por primera vez en España.

El retrato constituye una de las líneas transversales de la historia del arte, en la que confluyeron la tradición y las nuevas aportaciones formales a partir del arranque de la modernidad, a finales del siglo XIX. Además de alumbrar algunos de los iconos por excelencia del arte contemporáneo, este género ha sido receptivo a los descubrimientos formales a partir de las vanguardias históricas y ha servido de objeto de reflexión sobre la condición humana y la visión del otro, así como de la exploración de la esencia del propio artista. A continuación siguen algunos comentarios sobre los apartados mas notables de la exposición.

Los misterios del alma

Amedeo Modigliani. Retrato de Dedie
Partiendo de las corrientes de pensamiento que  buscaban ofrecer una lectura de aquello que el ser humano consideraba la cara oculta y, a veces, la más terrorífica faz de sí mismo, cobraron especial fuerza las teorías psicoanalíticas, en las cuales el sueño se consideraba la principal vía de acceso al subconsciente. Igualmente, emergieron otras ciencias o pseudociencias, como la fisiognomía, que buscaba en la expresión o en la morfología del rostro las características objetivas de la personalidad.
Hubo dos propuestas entre las vanguardias históricas, el fauvismo y el expresionismo, que se interesaron por indagar en la frágil subjetividad del individuo. Las ojeras que muestran las mujeres de Auguste Chabaud o de Alexej von Jawlensky parecen la metonimia de su propia negrura; mujeres fatales o ángeles caídos, erigidos en ídolos de un nuevo mundo urbano y eléctrico por medio de la pintura. La melancolía de la mujer retratada por Amedeo Modigliani, la mirada errante y deforme del botones de Chaïm Soutine, los rasgos emborronados de Jacques Villon, Marc Chagall o Martial Raysse intensifican la presencia casi sobrenatural del mundo interior del modelo.


De cara al formalismo

El aislamiento del rostro con respecto al resto del cuerpo, la simplificación de la morfología humana por una silueta perfecta, aleja la escultura de la imagen de la carcasa exterior del modelo. Los cubistas evocaron recurrentemente las referencias al primitivismo de la máscara ritual o a las expresiones arcaizantes del rostro. No obstante, a pesar de estar lejos del ejercicio mimético del "trazo a trazo", el proceso de análisis y de síntesis de la fisionomía del modelo por parte del artista permitió no solo una gran expresividad, sino también de vez en cuando una traducción en lenguaje plástico de la personalidad del propio modelo.
En este sentido, es conocida la anécdota protagonizada por Picasso tras recibir las críticas por el retrato de Gertrude Stein, pintado en 1906 -un hecho que, sin embargo, no se publicó hasta 1933-. La similitud entre la modelo y su representación en el lienzo era mínima; estaba claro, el retrato no se parecía. Dijeron que Picasso solo contestó "No se preocupe. Ya se parecerá".

Caos y desorden o la imposible permanencia del ser

Gino Severini. Autorretrato
Las obras reunidas en este apartado tienen en común su apuesta por la imperfección, en oposición exacta a los cánones de la belleza perfecta del clasicismo. Los seres representados parecen estar al borde de la ruptura, de la deconstrucción o de la descomposición, a un paso del colapso, de la quiebra, quizás de la desaparición. El Autorretrato de Francis Bacon, la escultura de Diego o el lienzo de Caroline, realizados por Alberto Giacometti, apuntan a esa fragilidad de la condición humana.
Esta fragilidad del ser es interpretada de distintas formas: si El vigilante de Jean Dubuffet nos sumerge en la maraña de su propia personalidad grotesca, el Autorretrato de Gino Severini, como reflejo en un espejo roto, parece aludir a la complejidad de lo humano, escondida bajo esa carcasa prismática.

Tras la fotografía

A la maduración progresiva del retrato académico al término de largas temporadas de pose, la fotografía opuso a mediados del siglo XIX el milagro, pero también, la dictadura de lo instantáneo. Si la fotografía plagia y reproduce los códigos de la pintura, especialmente en el dominio del retrato, la pintura ha recorrido un camino recíprocamente inverso. Así, ha tomando prestado el principio de la pose instantánea e improvisada -detectable aquí en las obras de Cassandre y Balthus-, del punto de vista rebajado o hundido -presente en André Derain-, a la vez que ha reivindicado lo pictórico del material o del motivo -como en la modelo de Albert Marquet-.

Rebasando la fotografía, la pintura del siglo XX ha refutado el principio de la objetividad en beneficio de la afirmación de una situación pictórica. Finalmente, el pop art como figuración narrativa ha abandonado el principio del modelo en su reproducción fotográfica para crear una "construcción en abismo" de la representación.

Matisse. Odalisca con pantalón rojo

jueves, 11 de octubre de 2012

Robots por todas partes



Durante mi juventud hubo un periodo de varios años en los que me interesé por la ciencia ficción. Mi escritor favorito, no fui muy original, era Isaac Asimov. En muchas de las novelas de Asimov aparecen robots. Una de las aportaciones más celebradas de este autor son sus famosas leyes de la robótica que, más o menos, vienen a decir:
  • Un robot no puede hacer daño a un ser humano o, por inacción, permitir que un ser humano sufra daño.
  • Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto si estas órdenes entrasen en conflicto con la Primera Ley.
  • Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la Primera o la Segunda Ley. 


Hoy me he acordado de la robótica porque me ha llegado un video muy curioso en el que se ve la interacción de un robot que, para ser de juguete resulta muy avanzado, con niños pequeños. He investigado un poco y he descubierto que existe toda una industria para satisfacer los deseos de muchas personas que disfrutan de la robótica como hobby o incluso desarrollan nuevas ideas o aplicaciones de la misma con propósitos comerciales.

El robot que aparece en el video es de Trossen Robotics. Esta empresa, fundada en 2005 esta especializada en la venta de kits y piezas de robots.  Se han convertido en pocos años en líderes en el campo de la robótica para usos educativos y de hobby. En su página web se pueden encontrar múltiples ofertas de robots humanoides, arácnidos, brazos robóticos y gran cantidad de piezas y componentes. Ademas de Trossen otras empresas ofrecen productos similares en el mercado lo que demuestra el dinamismo de lo que podríamos denominar "robótica de consumo". 

También he encontrado una plataforma llamada Arduino, que aparece mencionada repetidamente en muchos artículos y documentos sobre robótica de aficionados. Se trata de una herramienta para crear ordenadores capaces de detectar y controlar el entorno físico. Es una plataforma que se apoya  en componentes físicos construidos sobre un microcontrolador simple, y un entorno de desarrollo para escribir software para tal hardware siguiendo un modelo de código abierto. Arduino se puede utilizar para desarrollar objetos interactivos, que reciben entradas de una variedad de interruptores o sensores, y controlan una gran variedad de luces, motores y otras salidas físicas. Estos proyectos pueden ser independientes, o comunicarse con software que se ejecuta en un ordenador (por ejemplo, Flash, Processing, MaxMSP). Las tarjetas se pueden montar a partir de componentes o adquirirse ya montadas. El IDE correspondiente,  de código abierto, se puede descargar gratuitamente. El lenguaje de programación Arduino es una implementación de Wiring.

Me ha llamado mucho la atención todos estos proyectos que hasta hoy desconocía. Y que no están tan lejos de nosotros. En el número 1 de la Calle Alberto Aguilera de Madrid se pueden ver y tocar algunos de los robots mencionados. Con la generalización del acceso a estos componentes estoy seguro que el desarrollo de la robótica se va a acelerar y en no mucho tiempo veremos aplicaciones prácticas que tendrán repercusiones en nuestra forma de vida. Sin embargo creo que aun estamos lejos de vivir situaciones como las descritas en las novelas de Asimov.

sábado, 29 de septiembre de 2012

William Blake



A veces una mera casualidad depara agradables sorpresas. Había quedado con unos amigos en Neptuno. Por aquello de no llegar tarde, iba en Metro, fui con tiempo. Tanto que llegué 20 minutos antes de la hora acordada. Para matar el rato se me ocurrió acercarme al Caixaforum. Y allí me topé con la exposición de William Blake. Nunca había oído hablar de él. Bueno, quizá lo mencionaron en clase de Historia del Arte pero, si fue así, puedo asegurar que, además de ocurrir hace varias décadas, en aquel momento no me impresionó lo suficiente para grabarse en mi memoria y lograr que su recuerdo llegara hasta el presente.

En todo caso la rápida visita, no le pude dedicar mas que diez minutos, fue suficiente para darme cuenta que el tal Blake era un personaje notable, con un estilo pictórico muy característico y que, desde luego, la exposición era lo suficientemente buena como para merecer una visita mas detallada. Así que en cuento he tenido un rato me he vuelto a acercar al Paseo del Prado para dedicar mas de una hora a empaparme de William Blake.

He aprendido que, para muchos, es una de las figuras más importantes en la historia de la cultura británica. A lo largo de toda su carrera mantuvo que el arte era imaginativo y profético y que no debía ser constreñido por ningún dogma académico, social o religioso. Se le considera como un artista integral, ya que fue poeta, pintor, impresor e ilustrador. También fue notable su marcado compromiso con los problemas sociales de su época.
Según el catálogo de la exposición, “Blake creó su propio sistema cosmológico con el objetivo de transportar al espectador a un mundo de ensueño, a un reino mítico donde las fuerzas del bien y del mal conviven en un conflicto eterno. Su arte tiene un claro carácter imaginativo y profético, descrito a menudo como "visionario". Inspirado por la cultura gótica y el arte de Miguel Ángel, se distingue por la claridad y la fuerza de sus líneas, que, junto a los colores distintivos de su obra, usaba para expresar energías internas y fuerzas de la identidad humana”.

Se presentan unas ochenta obras que proceden de la Tate Britain de Londres Se han seleccionado para mostrar ejemplos de los temas más significativos del trabajo de este artista visionario: mitologías propias, fantasías y delirios sobre una particular visión del mundo respecto a temas religiosos, políticos y sociales. También se incluyen, a modo de complemento, una selección de obras de otros reconocidos artistas británicos sobre los que la influencia Blake fue notable. Entre ellos encontramos no solo a sus sucesores más inmediatos sino también a los simbolistas victorianos, y más recientemente, los artistas románticos del siglo pasado.


Por si no hay ocasión de ir al Caixaforum aquí esta el enlace a la visita virtual de la exposición y, si se quieren contemplar mas obras de Blake sin tener que ir a Londres ésta es la galería de la Tate con reproducciones de las obras de Blake que atesoran. 

martes, 18 de septiembre de 2012

Las matemáticas de Dios


En las últimas  semanas hemos asistido a las múltiples reacciones habidas en numerosos países de religión islámica ante la difusión por Internet de un video en el que se anticipaban algunas escenas de una insignificante y cochambrosa película, realizada en Estados Unidos,  sobre la vida de Mahoma. El simple hecho de la aparición en imágenes del principal profeta del Islam ya es ofensiva para sus seguidores. Si, además se banaliza o ridiculiza su vida, la película en cuestión pasa a ser una grave ofensa. Los seguidores más radicales han reaccionado con extrema violencia provocando graves disturbios en diversas ciudades en los que se han perdido vidas y se han asaltado las representaciones diplomáticas de algunos países occidentales, especialmente las de Estados Unidos. Desde nuestra perspectiva racional, estas respuestas parecen desproporcionadas. Sin embargo hay que tener en cuenta que cuando se afectan los sentimientos asociados a la fe religiosa no es fácil conciliar los comportamientos suscitados con la razón.

Sin querer establecer la más mínima comparación con los hechos antes citados, por pura casualidad, durante estos días he leído algunos artículos que me han hecho reflexionar sobre los conflictos que se producen al enfrentarse los asuntos de la fe con la realidad y la lógica del mundo en el que vivimos. Ya en algunas otras ocasiones he hecho referencia a las circunstancias que se producen en ciertos lugares de Estados Unidos cuando algunos fundamentalistas cristianos se oponen a la inclusión en los programas escolares de la enseñanza de la evolución natural por considerarla contraria a las explicaciones bíblicas. Como contraposición al evolucionismo, que consideran una mera teoría sin base suficiente, proponen el creacionismo que se apoya en los textos de las Sagradas Escrituras.

Charles Darwin propuso la teoría de la evolución en su libro El origen de las especies por medio de laselección natural publicado en 1859. A partir de entonces la mayoría de los científicos han aceptado que las especies vivas, incluida la nuestra, han evolucionado de otras. La biología molecular moderna hace que resulte difícil dudar que el origen de las distintas especies se remonta a un antecesor común único ya que todas las formas de vida conocidas comparten el mismo código genético. Es muy improbable que hubiera podido darse semejante coincidencia de forma independiente. A pesar de todo ello, el método científico somete sistemáticamente todas las teorías comúnmente aceptadas a constantes contrastes y, en muchas ocasionas a lo largo de la historia, algunas teorías, asumidas durante un tiempo han sido superadas y sustituidas por otras que suponían un mejor modelo de la realidad observada. Se podría admitir por tanto la posibilidad de que en un futuro la teoría darwiniana fuera mejorada y por tanto no considerarla definitiva.

Sin embargo los fundamentalistas cristianos dan un paso más y no solo cuestionan las ciencias naturales en aquello en lo que entran en aparente conflicto con la Biblia sino que también rechazan teorías matemáticas que se apoyan en la aplicación rigurosa del razonamiento lógico. Como muestra A Beka Books, empresa especializada en la edición de libros de texto para la enseñanza en escuelas cristianas, incluye en su web las siguientes consideraciones sobre las Matemáticas: Es el estudio de la lógica y el orden para su aplicación a la ciencia y a la vida diaria. Al contrario que los teóricos de las “matemáticas modernas”, que piensan que las matemáticas son la creación del hombre y, por tanto, arbitrarias y relativas, los libros Beka enseñan que las leyes matemáticas son una creación de Dios y por tanto absolutas. La tarea del hombre consiste en descubrir y hacer uso de las leyes del universo, tanto científicas como matemáticas. Los libros Beka presentan textos matemáticos tradicionales, atractivos y legibles, sin las complejidades de las modernas teorías tales como la teoría de conjuntos.

La teoría de conjuntos es una rama de las matemáticas formalizada por el matemático alemán Georg Cantor en el siglo XIX. El concepto de conjunto es fundamental en todas las ramas de las matemáticas puras y aplicadas. En su forma explícita, los principios y terminología de la teoría de conjuntos se utilizan para construir proposiciones matemáticas más claras y precisas y para explicar otros conceptos abstractos.

¿Por qué molesta la teoría de Conjuntos a los fundamentalistas cristianos? Cantor distinguió dos tipos de conjuntos: los finitos y los infinitos, siendo estos últimos aquellos en los que se puede establecer una correspondencia biunívoca entre los elementos del conjunto y los elementos de un subconjunto del mismo. El estudio de los distintos conjuntos de números llevo a Cantor a determinar que existen infinitas clases de conjuntos infinitos. Hay un magnifico vídeo que explica en términos bastante sencillos esta aparente complejidad. También en esta página se explican los mismos conceptos a nivel de un curso de álgebra elemental. 

Esto es precisamente lo que de ninguna manera es aceptable por los fundamentalistas, ya que, en su opinión, es incompatible con las enseñanzas Bíblicas. Para ellos solo Dios, el único Dios, es infinito y por lo tanto una teoría que demuestra la existencia de múltiples infinitos no es aceptable. Su solución a esta situación es ignorar por completo la teoría de Conjuntos independientemente de su trascendencia para el desarrollo de la ciencia matemática. Las consecuencias son evidentemente devastadoras. Aquí no se cuestiona solo la validez de una teoría sujeta en todo a la potencial crítica de la comunidad científica. Lo que se exige a los creyentes es la supremacía absoluta de la fe sobre la aplicación de la lógica y la razón que, según la propia doctrina que se impone, fue dada por el Creador a los seres humanos. La contradicción parece por tanto irresoluble.

Nota. Aquí hay una buena explicación pormenorizada de la Teoría de Conjuntos 

viernes, 17 de agosto de 2012

Ryanair sigue haciendo de las suyas


Ya he dedicado algunos comentarios a las sorprendentes ideas y prácticas de esta compañía aérea. Su éxito es evidente. En la actualidad es la compañía que mas pasajeros mueve en los aeropuertos españoles. La razón es el precio. Siempre este es un factor decisivo a la hora de elegir. Pero en las actuales circunstancias económicas lo es aun más. Y nadie da duros a cuatro pesetas. Eso significa que si los vuelos de Ryanair son mucho más baratos  de algún sitio tienen que salir las eficiencias que generan esa ventaja competitiva.

En numerosas ocasiones, se han producido  muchas informaciones sobre la estrategia, prácticamente mafiosa, que usa Ryanair para obtener subvenciones de administraciones locales a cambio de establecer vuelos con origen/destino determinados aeropuertos. No cabe duda que si alguien subvenciona una parte del precio del billete el precio que deben pagar los usuarios finales disminuye.

También son conocidos los abusos de esta compañía que juega con la buena fe de sus usuarios a  los que sorprende sobre todo la primera vez que vuelan con ella. La exigencia de documentación que no suele ser requerida por otras compañías, las restricciones en el embarque de equipaje de mano, con cargos desproporcionados respecto al precio del billete en caso del menor incumplimiento, el aprovechamiento de la clausura del vuelo para acorralar a los viajeros con entretenimientos son “trucos”  que generan ingresos adicionales cuando el cliente tiene poca capacidad de maniobra. Se podría decir que el cliente pica en una oferta que es engañosa porque solo tiene en cuenta el coste inicial del billete sin considerar los extras que van a aparecer posteriormente cuando ya no tiene otra opción que seguirle el juego a Ryanair o no volar perdiendo el dinero ya pagado. En la mayoría de las ocasiones esta tampoco es una opción porque también se perdería el dinero del resto de las reservas asociadas al viaje aparte del coste emocional que supone renunciar a un viaje deseado durante mucho tiempo.

Adicionalmente, lo que está saliendo a la luz últimamente son procedimientos operativos de Ryanair que, con el fin de reducir costes, ponen en peligro la seguridad de los pasajeros y tripulantes de sus vuelos.  El pasado 26 de julio, tres de sus aviones se vieran obligados a declarar estado de emergencia para aterrizar con prioridad en el aeropuerto de Valencia por falta de combustible.  Los tres vuelos tenían como destino Madrid pero, debido a una fuerte tormenta sobre el aeropuerto de Barajas, tuvieron que ser desviados a Valencia al igual que otros vuelos de otras compañías. Ryanair obliga a sus pilotos a volar con poca reserva de combustible de manera que en estas situaciones adversas tienen menos margen para permanecer en el aire. Podríamos decir que se aprovechan de que los demás no hacen lo mismo y pueden seguir volando mientras ellos “se cuelan” en las secuencias de aterrizaje al declarar su estado de emergencia. Si todas las compañías adoptaran procedimientos idénticos  las catástrofes serian inevitables.  

A mi corto entender Ryanair va mucho más allá de lo admisible en sus iniciativas para mejorar su eficiencia. Sus abusos se extienden por muchos ámbitos según lo relatado anteriormente. Su competencia desleal parece manifiesta. Las autoridades correspondientes deberían tomar cartas en el asunto antes de que tengamos que lamentar males mayores. Es un problema serio  aunque también puede ser denunciado en clave de humor como así se hace en este video.

viernes, 10 de agosto de 2012

LEGO cumple 80 años


Hoy hace 80 años nació LEGO. En tal día como hoy de 1932 un humilde carpintero danés, Ole Kirk Kristiansen, fundó en la ciudad de Billund una empresa que, además de construir escaleras de tijera, tablas de planchar y taburetes, también fabricaba  juguetes de madera. El hijo del fundador, llamado Godtfred, pronto hizo sus aportaciones a la fabricación de juguetes ya que se incorporó al negocio familiar con tan solo 12 años. El nombre LEGO tiene su origen en las palabras danesas leg godt que significan “jugar bien”. También se da la coincidencia de que si consideramos lego una palabra latina, una de sus traducciones es juntar o reunir, lo que coincide bastante bien con las actividades que solemos hacer con las piezas de LEGO.

Las creaciones iniciales de juguetes de madera se transformaron en plástico cuando se generalizó la disponibilidad de este material. Uno de los primeros juguetes modulares producidos por LEGO fue un camión que podía ser desarmado y re-ensamblado. En 1949 aparecen por primera vez los bloques de plástico interconectables, que supondrían la base del éxito de LEGO a nivel mundial. La idea clave, el concepto realmente innovador, era la posibilidad de encajar un bloque con otro, Habían nacido los LEGO Mursten o "bloques LEGO". Por aquel entonces los Kristiansens ya daban trabajo a  50 personas.

En 1954, Godtfred, el hijo de Ole Kirk, se convirtió en el director administrativo de LEGO por lo que la sucesión en la dirección de la compañía a la muerte de su padre en 1958 no supuso ninguna dificultad. Sobre la solida base construida, el imperio LEGO se fue extendiendo por todo el mundo mejorando y ampliando su gama de productos.  Sin diferencia de culturas o tradiciones los niños disfrutaban por igual de la versatilidad de los juguetes LEGO que sus padres compraban encantados seguros sus posibilidades educativas y formativas. El prestigio de LEGO era su mejor argumento de venta.  

En mi opinión hay otra clave que justifica el éxito de LEGO. Desde el principio, los ladrillos LEGO a través de su historia han sido parte de un sistema. Cada vez que se lanza una nueva serie de piezas, cada una de ellas mantiene la compatibilidad con el resto del sistema. Cualquier pieza LEGO, sin importar su tamaño, forma o función, encaja con cualquier otra pieza LEGO de alguna manera. Por ejemplo, los mecanismos, engranajes y motores de los juegos de la serie Technic avanzados, diseñados para adolescentes, son compatible con los ladrillos DUPLO diseñados para niños de 3 años de edad. Gracias a esta singular característica el sistema LEGO crece y se adapte mientras los niños se hacen más mayores. Las infinitas combinaciones que ofrece el sistema mantienen a muchos adultos, entre los que me encuentro, fascinados. Hasta existen creadores de obras de arte basadas en los famosísimos ladrillos LEGO. 

Con motivo del 80 cumpleaños LEGO ha creado una película de animación conmemorativa. La coincidencia de la efemérides con la celebración de los Juegos Olímpicos de Londres ha dado pie a The Guardian para crear una aportación que rinde tributo a ambos eventos. Son numerosos también los blogs que saludan el aniversario así como algunos periódicos. En este mundo en el que parece que lo único interesante son los videojuegos, los juguetes electrónicos, los smart phones y demás artilugios comecocos, los LEGOS siguen siendo la esperanza para fomentar la imaginación y la creatividad de los jóvenes de menos de 100 años. ¡Larga vida a LEGO!

Curiosidad en Marte

El pasado 6 de agosto, a las 7:32 , hora española, El vehículo robotizado Curiosity aterrizó en la superficie de Marte. Se coronaba así, con éxito, la odisea de esta maravilla tecnológica que fue lanzada al espacio el    26 de noviembre de 2011 mediante un cohete Atlas V 541. “Bienvenidos a Marte”, ha sido el saludo del director del centro responsable de la misión del Curiosity, Charles Elachi. Pocos minutos después han llegado las primeras imágenes al centro de control en California. Son en blanco y negro y de escasa calidad, pero demuestran que los equipos han llegado en estado correcto para realizar sus cometidos. Para celebrarlo, los ingenieros y científicos de la misión han estallado en aplausos, vítores, lágrimas, abrazos y euforia generalizada.

Toda esta tensión tiene su origen en el suspense creado en la última fase del viaje conocida como “Los siete minutos de terror”. Se trata  de una seria de complicadas maniobras con ingeniosos procedimientos y dispositivos, que tienen como objetivo situar suavemente el robot sobre la superficie de Marte partiendo de un estado de entrada en la atmosfera del planeta a una velocidad de 20.000 Km. Por hora. En este video se explica con todo detalle el proceso del descenso. “Los siete minutos del terror se han convertido en los siete minutos de triunfo”, manifestó el director científico de la NASA, John Grundsfeld. A través de Tweeter, cientos de miles de seguidores han sido informados de cada eventualidad de la maniobra del descenso hasta que, finalmente, este mensaje ha confirmado la llegada exitosa a la superficie de Marte.

En las primeras imágenes que ha enviado el Curiosity  tomadas con una cámara gran angular se aprecia el horizonte de Marte en el cráter Gale, en un entorno rocoso, lugar donde ha aterrizado el robot. El vehículo tiene que desplegar sus equipos antes de enviar buenas fotografías en color, lo que puede tardar varios días. Además, los técnicos ya han avisado de que, al ser una nave muy compleja, pasarán semanas antes de que empiece la misión propiamente dicha, tras comprobar exhaustivamente el funcionamiento de todos sus instrumentos.

El Curiosity es el vehiculo  más complejo que haya llegado jamás al suelo de Marte en el que se han volcado la mayor capacidad tecnológica disponible actualmente. Nunca se había hecho algo tan arriesgado y difícil en Marte como esta maniobra de aterrizaje. La transmisión de las señales enviadas, que tardan 13,8 minutos en llegar a la Tierra a la velocidad de la luz, supone otro alarde de la ciencia y la tecnología. Para lograrlo ha sido necesario sincronizar las orbitas y antenas de dos satélites de la NASA (Odyssey y MRO), situados desde hace varios años en la órbita de Marte. Todo el esfuerzo y los recursos implicados en esta misión tienen cuatro objetivos fundamentales que deben ser cumplidos en los próximos 23 meses: Determinar si existió vida alguna vez en Marte, caracterizar el clima de Marte, determinar su geología y prepararse para la exploración humana de Marte.


Aunque se trata de un logro básicamente norteamericano, los directivos de la misión Curiosity de la NASA han elogiado la cooperación internacional demostrada en el proyecto y concretamente la participación española, que se ha reflejado en la aportación de la estación meteorológica de que va dotado el robot. Este componente ha sido desarrollado por el Centro de Astrobiología (CSIC-INTA). Además, la antena de alta ganancia del Curiosity, todavía sin desplegar, es obra de las empresas EADS CASA y Sener y en la maniobra de aterrizaje ha participado la Estación de Robledo de Chavela (Madrid), operada por INTA, que forma parte de la Red de Espacio Profundo de la NASA.